
Esta muestra, compuesta por un total 75 obras -62 pinturas, 8 dibujos, 2 aguafuertes, 2 esculturas y un cartel-, tiene su origen en la colección privada de Claude Ghez que tiene su sede permanente en el Petit Palais de Ginebra.

Paris 100 Urte/Años se convierte en una exposición, y este es uno de sus valores, que documenta un tiempo y un lugar, pero también su acelerado desarrollo y cambio; ¡hubo tiempo en el que había molinos en París! (ahí está ‘Le maquis de Montmartre’ de Quiet para demostrarlo). En este sentido resultan esclarecedoras las fotografías que se recogen al inicio de la muestra y que aparecen recogidas bajo el epígrafe de “Paris en la fotografía del cambio de siglo”. Aquí hay que destacar las imágenes de los Hermanos Séeberger, el contundente y emotivo, que llama a la solidaridad de cualquier artista, “Jean Galeanis arrastrando el cohce y su cuadro rechazado en el Salón de Otoño”, y el magnífico retrato de Piet Mondrian a cargo de Andor Kertész.

En cuanto a las pinturas, merece la pena detenerse en las dos obras puntillistas de Marevna, que son de lo más llamativo de la exposición, el atrayente “Portrait de Massaida” de Steinlen, una de las mejores piezas mostradas; las pinturas impresionistas de Gustave Loiseau; las dos pequeñas piezas de Renoir y los trabajos de Nicola Tarkhoff, , en las que se nota el influjo de Manet. Eso sin olvidar el magnífico Albert Gleizes, la única pintura abstracta colgada, y las dos telas cubistas de María Blanchard que dan cuenta de la importancia y la valentía artística de esta mujer
Ahora me temo que ya no, pero está claro que hubo un tiempo en el que París bien valió un misa.
Qué:Paris 100 Urte/Años
Dónde:Sala Kubo-Kutxa. San Sebastián
Cuando: Hasta el 5 de abril de 2010
(Imágenes, de arriba abajo: obras de Quizet, Tarkhoff y Degas. Cortesía de Sala Kubo-Kutxa)